Aulas del futuro empiezan a ser reales, con pantallas holográficas y gafas de tercera dimensión

En pocos años, colegios y universidades tendrán una variedad de equipos tecnológicos que harán las clases aún más prácticas de lo que ya son.

En Barranquilla hay un salón que podría considerarse una muestra de lo que serán las aulas de clases del futuro.

Está ubicado en la Universidad del Norte y cuenta con un tablero electrónico que convierte los apuntes del profesor en material digital, que pueden guardarse en una memoria y enviarse como archivo a cualquier dirección de correo electrónico.

El aula cuenta también con una cámara que capta imágenes en tercera dimensión, las cuales se proyectan para que los alumnos comprendan mejor los temas.

“Todo es como un truquito que crea una relación más amena con las materias”, dice Jonathan Bayona, estudiante de décimo semestre de ingeniería de sistemas. “Ver clases allí me motiva a participar y es muy atractivo utilizar el tablero inteligente y las tizas o el borrador digitales”.

Sitios como este hacen pensar que en las aulas del futuro no existirán los tableros tradicionales, pues se reemplazarán por pantallas que reflejan imágenes en tercera dimensión. Además, que los cuadernos y libros serán cambiados por computadores portátiles.

Ejemplo de ello es la iniciativa Classmate PC, de Intel, un computador personal para los alumnos. Estos equipos contienen un software diseñado por Microsoft para realizar trabajos y prácticas en las diferentes materias que se enseñan en los colegios. Es apenas un primer paso para el aula del futuro.

Este proyecto es una campaña divulgada en países de África, Medio Oriente y Latinoamérica, como Colombia. La idea de estas empresas es que los jóvenes no carguen maletas repletas de útiles y que encuentren en un solo equipo toda la información necesaria para el aprendizaje. El costo de cada PC es cercano a los 300 dólares (unos 600 mil pesos).
Esta iniciativa secunda a la del gurú Nicolás Negroponte, que trabaja en su proyecto Un Portátil por Niño, a solo 100 dólares. En octubre se conocerá, pero se estima que el precio no baje de 188 dólares (370 mil pesos).

En todo caso, una opción más barata está en camino, y expertos creen que hará parte fundamental del futuro de las clases tradicionales: el celular, que cada vez se ve con más frecuencia en las escuelas.